El equipo de cuidado de textiles de Francia ayuda a los clientes de lavanderías en tiempos difíciles

A medida que la crisis del coronavirus sigue agitando la economía a nivel mundial, con muchos países en estado de alarma, abunda la información acerca de su prevención. Queda claro que llevar a cabo una adecuada limpieza de manos es vital y una de las principales líneas de defensa. Sin embargo, mantener limpias las superficies duras y blandas también puede desempeñar un papel importante en la lucha contra la propagación de un virus.

Estudios científicos como este, publicado en la revista médica Journal of Hospital Infection demuestran que el virus continúa viviendo sobre superficies inorgánicas durante un máximo de 9 días. Los CDC dan directrices para la limpieza del hogar, incluida la lavandería, pero, ¿y las operaciones a gran escala de las lavanderías profesionales? Los hospitales, las residencias geriátricas y las lavanderías comerciales deben garantizar la limpieza y desinfección eficaces de toallas y ropa de cama contaminadas. Los servicios de cuidado de textiles cumplen con una función decisiva a desempeñar para ayudar a detener la propagación.

Ecolab es un proveedor de soluciones de limpieza y prevención de infecciones para hospitales e industrias que en este momento están trabajando para contener la propagación del virus. Su equipo ha estado colaborando estrechamente con clientes de lavanderías comerciales como SDEZ, que presta sus servicios a residencias geriátricas en Francia, en la implementación de programas de lavado y desinfección.

Olfa tiene 13 a los que visita con regularidad, incluidas tres sedes que acaban de solicitar la ayuda urgente de Ecolab para implementar programas viricidas que les ayuden a desinfectar textiles contaminados.

En solo tres días, el equipo francés ha sido capaz de responder y dar cobertura a un total de 15 sedes, garantizando la correcta implementación de los procesos de lavado viricidas. Ha sido un ejemplo del esfuerzo común de los asociados durante una crisis para ayudar a un cliente. "Mi compañero Jean-Marc intervino para visitar dos sedes de clientes cuando tuve que quedarme en casa con mi hijo", cuenta Olfa. "Así he podido gestionar la tercera intervención para otro cliente por teléfono".

Los asociados pueden encontrarse a veces en primera línea, como cuando Olfa intervino en otra sede de un cliente: un hospital del Distrito 13 de París que trata casos confirmados de COVID-19. El reto añadido, aparte de la implementación de un programa de lavado viricida certificado que haya demostrado su eficacia en la limpieza de textiles contaminados, es cumplir con las estrictas normativas que rodean la temperatura del agua que se puede descargar.

Es en épocas como esta cuando se demuestra el valor real de sistemas de monitorización remota como enVision, que monitoriza y permite el cambio de dosificación a distancia. Olfa ha explicado cómo pudo utilizar el programa para cambiar la dosis para uno de sus clientes.

Independientemente de si se trata de una visita presencial de emergencia, asesoramiento experto por teléfono, un programa de monitorización remota o una combinación de los tres, el equipo de Cuidado de Textiles de Ecolab en Francia está respondiendo a todas las llamadas y actuando con rapidez. Los clientes de lavanderías están adaptando sus servicios a la nueva normalidad y Ecolab les presta asistencia a diario para mantener sus empresas en funcionamiento, lo que es vital para combatir el virus.