ZONAS DE BASURA
Los muelles de entrada y las zonas de basura son un punto de entrada común para las plagas. Las plagas pueden estar presentes en las mercancías entrantes y los roedores, aves y otras plagas pueden colarse por las puertas que permanecen abiertas durante largos periodos de tiempo. Una vez dentro, estas plagas pueden dañar tanto la materias primas como los productos acabados, además de suponer un grave riesgo para la seguridad alimentaria y para la salud pública.
La solución:
Asegúrese de que el personal está formado para inspeccionar las mercancías entrantes para detectar signos de actividad de plagas o de deterioro. Minimice el tiempo que las puertas permanecen abiertas e inspecciones periódicamente el exterior del edificio para proteger y rellenar orificios y huecos alrededor de las puertas. Mantenga las zonas de basura limpias, evite dejar residuos en el suelo y mantenga los contenedores cerrados y sáquelos con frecuencia de la propiedad.
Tanto las zonas de almacenamiento de materias primas como de productos acabados son grandes y atractivos escondrijos de alimentos para las plagas. Las plagas de productos almacenados pueden llegar escondidas en las materias primas entrantes, y no solo dañar estos materiales, sino infestar potencialmente todas las instalaciones por completo, provocando el cierre de la actividad y mayores pérdidas de producto. Los roedores pueden abrirse paso fácilmente por huecos y agujeros y dañar rápidamente los materiales.
La solución:
Implementar técnicas de limpieza y monitorizar los bienes entrantes y la actividad de las plagas en sus zonas de almacenamiento de materias primas y productos acabados. Asegúrese de que todas las puertas de las instalaciones están cerradas siempre que sea posible, inspeccione en busca de huecos y orificios en los muros exteriores e interiores y siga a rajatabla los protocolos de limpieza.
de reproducción ideal
El mantenimiento y la limpieza programadas periódicamente de los equipos de producción es vital para la seguridad alimentaria. Este equipo y las zonas circundantes, como los desagües, pueden ensuciarse y desgastarse fácilmente y suponer un entorno ideal para la cría de moscas y otras plagas. La reproducción exponencial puede transformar rápidamente un problema pequeño en una invasión que amenace la seguridad alimentaria y dañe mercancías y líneas de producción.
La solución:
Limpie y desinfecte regularmente los equipos de producción y los desagües siguiendo los protocolos adecuados y usando los productos químicos designados para evitar incidentes con la seguridad alimentaria y que se instalen plagas.
Las plagas de los productos almacenados pueden trasladarse a los silos de grano in situ, donde su población puede expandirse y causar daños significativos y grandes pérdidas de materias primas y, finalmente, contaminar el flujo de producción completo.
La solución:
La fumigación, realizada por expertos altamente formados, puede eliminar de forma eficaz las plagas de los productos almacenados para que no invadan los silos de grano in situ.
El personal puede traer consigo plagas en la comida e incluso en la ropa. Las condiciones insalubres pueden desarrollarse fácilmente en cualquiera de estas zonas, algo que atrae a plagas y las convierte en zonas de reproducción y alimentación ideales. Estos problemas de plagas pueden suponer riesgos para la seguridad alimentaria y la salud pública para los empleados y pueden propagarse con rapidez por otras áreas de las instalaciones.
La solución:
Controle con regularidad la actividad de las plagas. Siga las mejores prácticas de limpieza, desinfección y seguridad alimentaria para mantener las salas de descanso, las cafeterías y los vestuarios limpios. En particular, asegúrese de retirar la basura periódicamente y de que el suelo y los drenajes se limpien y se desinfecten con regularidad.
CUBIERTA
Las sistemas de climatización, las cintas transportadoras, los silos y los sistemas de escape de los equipos en y alrededor del techo de una instalación son un entorno atractivo para anidar y para otras actividades de las aves. Tener actividad de aves supone una infracción directa de las normas de la FSMA, ya que estas plagas pueden traer enfermedades y otros patógenos al contacto con el personal, el equipo y el producto, lo que supone un riesgo significativo para la seguridad alimentaria y la salud pública.
La solución:
Inspeccione, identifique y solucione las zonas con problemas de plagas regularmente. Cree barreras, controle la limpieza y limite las zonas de aguas estancadas en el exterior para evitar la actividad de las aves.
Como los laboratorios de control de calidad prueban los productos entrantes y salientes, realizan pruebas de duración y prueban nuevas recetas, los alimentos y otros productos almacenados en la zona de laboratorio durante largos periodos de tiempo pueden suponer grandes riesgos de infestación por plagas. Esto puede presentar potenciales problemas de seguridad alimentaria y cumplimiento normativo, puede alterar las pruebas de control de calidad y llegar a generar problemas que pueden extenderse a otras áreas de las instalaciones.
La solución:
Mantenga todos los productos bien cerrados y almacenados en zonas adecuadas y asegúrese de rotar los productos de manera oportuna. Siga las mejores prácticas de limpieza, desinfección y seguridad alimentaria y ponga en marcha técnicas de monitorización proactiva.
El riesgo: una fuente de alimento atractiva
Tanto las zonas de almacenamiento de materias primas como de productos acabados son grandes y atractivos escondrijos de alimentos para las plagas. Las plagas de productos almacenados pueden llegar escondidas en las materias primas entrantes, y no solo dañar estos materiales, sino infestar potencialmente todas las instalaciones por completo, provocando el cierre de la actividad y mayores pérdidas de producto. Los roedores pueden abrirse paso fácilmente por huecos y agujeros y dañar rápidamente los materiales.
La solución:
Implementar técnicas de limpieza y
monitorizar los bienes entrantes y la actividad de las plagas en sus zonas de almacenamiento de materias primas y productos acabados. Asegúrese de que todas las puertas de las instalaciones están cerradas siempre que sea posible, inspeccione en busca de huecos y orificios en los muros exteriores e interiores y siga a rajatabla los protocolos de limpieza.
La solución:
Asegúrese de que el personal está formado para inspeccionar las mercancías entrantes para detectar signos de actividad de plagas o de deterioro. Minimice el tiempo que las puertas permanecen abiertas e inspecciones periódicamente el exterior del edificio para proteger y rellenar orificios y huecos alrededor de las puertas. Mantenga las zonas de basura limpias, evite dejar residuos en el suelo y mantenga los contenedores cerrados y sáquelos con frecuencia de la propiedad.
de reproducción ideal
El mantenimiento y la limpieza programadas periódicamente de los equipos de producción es vital para la seguridad alimentaria. Este equipo y las zonas circundantes, como los desagües, pueden ensuciarse y desgastarse fácilmente y suponer un entorno ideal para la cría de moscas y otras plagas. La reproducción exponencial puede transformar rápidamente un problema pequeño en una invasión que amenace la seguridad alimentaria y dañe mercancías y líneas de producción.
La solución:
Limpie y desinfecte regularmente los equipos de producción y los desagües siguiendo los protocolos adecuados y usando los productos químicos designados para evitar incidentes con la seguridad alimentaria y que se instalen plagas.
Las plagas de los productos almacenados pueden trasladarse a los silos de grano in situ, donde su población puede expandirse y causar daños significativos y grandes pérdidas de materias primas y, finalmente, contaminar el flujo de producción completo.
La solución:
La fumigación, realizada por expertos altamente formados, puede eliminar de forma eficaz las plagas de los productos almacenados para que no invadan los silos de grano in situ.
El personal puede traer consigo plagas en la comida e incluso en la ropa. Las condiciones insalubres pueden desarrollarse fácilmente en cualquiera de estas zonas, algo que atrae a plagas y las convierte en zonas de reproducción y alimentación ideales. Estos problemas de plagas pueden suponer riesgos para la seguridad alimentaria y la salud pública para los empleados y pueden propagarse con rapidez por otras áreas de las instalaciones.
La solución:
Controle con regularidad la actividad de las plagas. Siga las mejores prácticas de limpieza, desinfección y seguridad alimentaria para mantener las salas de descanso, las cafeterías y los vestuarios limpios. En particular, asegúrese de retirar la basura periódicamente y de que el suelo y los drenajes se limpien y se desinfecten con regularidad.
de anidación atractivo
Las sistemas de climatización, las cintas transportadoras, los silos y los sistemas de escape de los equipos en y alrededor del techo de una instalación son un entorno atractivo para anidar y para otras actividades de las aves. Tener actividad de aves supone una infracción directa de las normas de la FSMA, ya que estas plagas pueden traer enfermedades y otros patógenos al contacto con el personal, el equipo y el producto, lo que supone un riesgo significativo para la seguridad alimentaria y la salud pública.
La solución:
Inspeccione, identifique y solucione las zonas con problemas de plagas regularmente. Cree barreras, controle la limpieza y limite las zonas de aguas estancadas en el exterior para evitar la actividad de las aves.
CUBIERTA
Como los laboratorios de control de calidad prueban los productos entrantes y salientes, realizan pruebas de duración y prueban nuevas recetas, los alimentos y otros productos almacenados en la zona de laboratorio durante largos periodos de tiempo pueden suponer grandes riesgos de infestación por plagas. Esto puede presentar potenciales problemas de seguridad alimentaria y cumplimiento normativo, puede alterar las pruebas de control de calidad y llegar a generar problemas que pueden extenderse a otras áreas de las instalaciones.
La solución:
Mantenga todos los productos bien cerrados y almacenados en zonas adecuadas y asegúrese de rotar los productos de manera oportuna. Siga las mejores prácticas de limpieza, desinfección y seguridad alimentaria y ponga en marcha técnicas de monitorización proactiva.
